Kakāsana o la postura del cuervo. Es una postura básica del equilibrio sobre
las manos. Una de las características de este āsana es el centro de
gravedad de la persona, que está muy bajo. Hay una variedad enorme de las posturas
de equilibrio sobre las manos con la posición muy baja del centro de gravedad
del practicante. Es el motivo, porque aprender estas posturas es muy fácil. Algunos son poco más
complicados que otros, pero incluso estas posturas más difíciles de hacer, se
puede aprender muy rápido.
A nivel físico este āsana desarrolla más que todo la
fuerza de los brazos y las muñecas. Además, como esta postura, y todas otras
posturas de este tipo, se exige una concentración enorme y como consecuencia,
la presencia mental durante todo el tiempo de la práctica del āsana.