Me gustaría escribir sobre
nuestro curso intensivo de formación de profesores de yoga para dar a conocer a
la gente que se interesa por la formación sobre algunos aspectos de este curso
en concreto. En nuestra web está escrito mucho, pero todo lo que está escrito
es, se puede decir, información técnica. Se puede encontrar la información
sobre el programa, horario, reconocimiento internacional del curso, de
titulación y muchas otras cosas. En este articulo quiero enseñar el curso desde
otro ángulo. Y este ángulo es el “ángulo humano”. Vamos a ver qué pasa con un
alumno, como se cambia y que es lo que encuentra.
Veremos algunos momentos
claves del curso.
Primero, es la comida. Es una
pregunta, y si decir la verdad – una preocupación de muchos alumnos. La gente
me llama y pregunta: “Pero ¿es verdad que estáis comiendo solo dos veces al
día?” Pues, si, comemos dos veces. Tenemos el desayuno a las 11 de la mañana y
la cena a las 19 de la tarde. Finalmente no hay mucho tiempo entre estas dos
comidas. También siempre durante de todo el día están las frutas y cualquier
alumno en cualquier momento puede coger la fruta. También, si alguien tiene
alguna necesidad, puede preparar el bocadillo por su cuenta en cualquier
momento y comerlo. A menudo, en principio del curso, se puede ver que algunos
alumnos comen a las 8 de la mañana antes de la clase. Pero pasa una semana e ya
la gente entiende en la propia práctica que no es el mejor momento – comer
antes de la clase. En relación de la comida quería decir dos cosas todavía.
Primero es una comida fabulosa, muy rica y súper presentada. En el curso
tenemos una cocinera que se ocupa de la comida. Los platos se repiten pocas
veces. Puede ser que a lo largo del curso se repiten tres, cuatro veces.
Prácticamente cada día tenemos algo nuevo. Y si un alumno tiene cumple a lo
largo del curso, lo ocurre a menudo, uuuuuuu!!!, ¡que cena tenemos! Otra cosa
que quería decir, que en unos días después de empezar, la ansiedad de comer
desaparece. Si en el principio del curso algunos alumnos comen por la mañana y
en la cena intentan rellenar bien el plato, por caso supongo, al final del
curso están más tranquilos y comen muy natural – cuando hay hambre y en las horas
previstas. Este motivo es la fluidez del curso y la forma de la vida, que se
relaciona más que todo con tranquilidad. Y esta tranquilidad interior, que se
encuentra en el curso, se refleja en todo, incluso en la comida.
Otra pregunta que a menudo
aparece: si es necesario tener una práctica previa del yoga. Se puede decir que
en general, si estaría bien si un alumno practica el yoga antes de tomar la
decisión de entrar en el curso de formación. ¿Cuánto tiempo hay que practicar
antes? Pues, aquí no hay criterios. Algunas personas practican años antes de
tomar esta decisión y otros solo meses. Ya es la cosa de cada uno. En este
aspecto quería mencionar una cosa. Aunque es así – mejor que el alumno practica
el yoga antes, nuestros cursos están abiertos para toda la gente, incuso para
alguien, quien nunca practicaba yoga. Raramente lo ocurre, pero a veces, si. La
idea es que a lo largo del curso cada alumno recibe todo conocimiento necesario
para ser profesor de yoga, mejora sus habilidades físicas, encuentra la
seguridad propia en dar las clases. También hay que recordar que el deber de un
profesor es tener más conocimiento que su alumno y saber, como transmitir este
conocimiento. Y esto es el objetivo del curso – preparar los alumnos para que
sean profesores.
Normalmente, en el curso
tenemos tres tipos de alumnos. La mayoría son personas que practicaba el yoga
antes y ha llegado un momento cuando deciden de formarse como profesores de
yoga. Otro tipo de alumnos son personas que ya están dando las clases de yoga.
En cierta forma se han formado solos, con ayuda de los libros y dan clases a
sus amigos y familiares. Están trabajando en un circuito pequeño y para salir
al publico grande necesitan el diploma. Y el tercer tipo de los alumnos son
personas que nunca hacían el yoga, pero tienen cierta idea que les atrae a esta
disciplina y también están muy bienvenidos al curso. También quería mencionar
que en el curso hay todo tipo de la gente: mayores y jóvenes, con buena salud y
con algunas problemas, físicamente preparadas y algunos un poco flojitos. Todos
pueden cruzar el curso. El yoga no es estar en una postura complicada. El yoga
es la forma de la vida que tiene su fin e incluye el trabajo con el cuerpo. Y
si una persona no puede hacer alguna asana, no importa, hay miles de asanas y
siempre se puede formar una tabla adecuada para cada uno. Justamente esto
aprendemos en el curso – una forma de vivir diferente, vivir sano con la paz en
tu corazón.
De vez en cuando la gente que
llama para preguntar por el curso me dice:”Es que un amigo mío (mi profesor de
yoga, familiar, un conocido o alguien …) me ha dicho que no se puede formarse,
como profesor de yoga, durante de solo un mes”. Primero, quiero decir con mucha
seguridad, que la persona que dice esto, no cruzó el curso de formación en la
forma intensiva, entonces, simplemente no sabe de que se trata. Pero es muy
humano tener los puntos de vista sobre cualquier cosa de este mundo, incluso
sobre aquellas que no se experimentaban y luego hablar y expresar sus opiniones. También
hay que distinguir de qué se trata, cuando hablamos de formación de profesores
de yoga. Si se trata de formación espiritual, cualquier curso de formación en
yoga que se ofrece en cualquier lugar del mundo, es solo el principio de esta
formación que no tiene el fin. Es la evolución espiritual de cada uno que tarda
toda la vida y cualquier curso de formación, simplemente forma solo parte de
este camino largo. Creo que el curso que se hace en forma intensiva, cuando el
alumno vive en la escuela durante de algún tiempo, un mes por ejemplo, es el
curso más adecuado desde punto de vista de formación espiritual. Si comparamos
dos formas del mismo curso: una forma es hacer el curso en forma intensiva
durante de un mes. Y otra forma es hacer el curso en forma de fines de semana
(un fin de semana al mes – es el típico ritmo que se ofrece en España) durante
de dos años académicos, pues la diferencia está en conexión con el yoga en su
aspecto global. El curso intensivo es la única forma, cuando el alumno puede
conectar con el yoga durante de, relativamente, largo tiempo y sentir lo que es
la forma de la vida en yoga. Si un alumno cruza el curso en forma de fines de
semana – es fabuloso, pero este alumno viene para un fin de semana y conecta
con el yoga en cierta forma. Es una conexión no tan profunda como en el curso
intensivo. Simplemente porque es corta. Y luego este alumno, cuando se termina
el curso el domingo se va a su casa y reconecta con la sociedad. En este
momento depende mucho de la persona. Algunos alumnos son entusiastas de yoga y
practican en el tiempo entre fines de semana, estudian como por su cuenta,
tanto por la exigencia de la escuela. Y otros no hacen nada. Incluso estos
alumnos entusiastas, aunque tienen el propio interés en el estudio de yoga,
están conectados con la forma de la vida de yoga menos que cualquier alumno del
curso intensivo. Simplemente, porque viven en la sociedad que no ayuda a esta
conexión. Y otros alumnos que no son entusiastas se desconectan de yoga
totalmente hasta que venga el próximo fin de semana. Si vemos el curso
intensivo y lo comparamos con cualquier otra forma desde punto de vista de
formación profesional, pues desde este punto de vista hay sus puntos “pro” y
“contra” de cada curso. Lo buenos del curso intensivo, es que los alumnos no
tienen escapatoria J, y aprenden todo,
independientemente si alguien es entusiasta de yoga o no. Lo que es difícil de
este curso es que hay que meter mucha información en la cabeza durante de,
relativamente, poco tiempo y a veces a lo largo del curso ocurre como “una
diarrea de sanscrito” en la cabeza del alumno. Lo bueno del curso en forma de
fines de semana es el tiempo que tiene el alumno para aprender y asimilar el
programa del curso. Y lo que es relativamente no bueno, en esta forma el
aprendizaje y la formación del alumno depende mucho de él mismo. Y si es un
alumno que no es entusiasta del yoga, aunque tiene mucho tiempo, pues se
prepara poco y casi no se cambia interiormente. Para concluir: el curso intensivo
es ideal para vivir lo que es el yoga en su totalidad y conectar profundamente
con esta forma de la vida. Y es perfecto desde punto de vista de formación
profesional. Y el curso en forma de fines de semana es igualmente un curso
perfecto, pero solo en condición si el alumno es un entusiasta de yoga. Voy a
dejar a comparar lo bueno con lo bueno y me gustaría contar algunas cosas más
de nuestro curso intensivo. ¿Qué es, lo que encuentran
los alumnos, al cruzar el curso intensivo? Pues, cada uno viene al
curso, buscando algo. Algunas personas claramente quieren ser profesores y
buscan el conocimiento. Otros hacen el curso para el propio desarrollo. Alguien
quiere mejorar sus condiciones físicas y alguna gente busca (me gusta mucho esta
motivación de venir al curso intensivo) la relajación durante de un retiro
relajado. Lo interesante de este curso es que toda la gente encuentra lo que
está buscando y todavía, encuentra mucho más. Este mucho más, generalmente se
puede dividir en dos partes. La primera parte es aclaración de lo que es el
yoga. Actualmente, en el occidente todos quien practica el yoga, tenemos la
idea lo que es. En mayoría de las veces es una idea errónea. Puede ser que no
es correcto decir así: ¿quién sabe lo que es el yoga en su totalidad? Pero con
mucha seguridad se puede decir que la gente tiene la idea reducida de lo que es
el yoga. Esta idea se reduce, normalmente, hasta los asanas o a veces incluye
algo más. Desde luego no siempre, pero es como una práctica general – la gente
asocia yoga con la práctica de asanas. La mayoría de los alumnos, si
practicaban los pranayamas en sus clases, antes de venir al curso, lo hacían
muy poco y solo uno o dos tipos. Y además de la práctica de asanas y pranayamas
hay tantos aspectos que forman este concepto que es la forma de la vida de
yoga. No quiero profundizar este tema, porque es demasiado amplio y no es el
tema de este escrito. Solo quiero repetir que los alumnos, además de sus
propios objetivos que tienen antes del curso encuentran lo que es el Yoga. Y la
segunda parte de este “mucho más” que encuentran los alumnos en el curso es La Paz. Sobre la paz interior está escrito un montón, se habla infinito, pero
quien lo tiene realmente. La forma del curso que te permite desconectar
totalmente de la sociedad y todos sus rollos y además te dirige hacia
interiorización, esta forma provoca conectar profundamente con este
conocimiento y con esta sabiduría del yoga que es la paz interior. En el curso
se aprende lo que es y se experimenta. Después sabes en la propia práctica que
es, estar constantemente en el Tu Centro. Y si un día la sociedad te saca de
este Centro, sabes la forma y el camino de regreso. Los Límites propios. Cuando un alumno viene al
curso, tiene más o menos la idea a dónde quiere llegar. Imagínate que estas en
una colina y más adelante, bastante lejos, ves un bosque y quieres llegar a
este bosque e investigarlo. Pues, en el curso llegas a diez veces más que la
distancia hasta este bosque. Cualquier alumno, claramente, sobrepasa sus
propios límites hasta donde ni él podía imaginar. En los primeros días las
palabras:”no puedo” es que más se escucha en las clases. Otra variación de este
no puedo es:”me falta la fuerza”, “es imposible”, “nunca podré hacerlo”. Y
luego, poco a poco estas palabras desaparecen del lenguaje de alumno. Los
alumnos aprenden en la propia práctica que “no puedo” simplemente no existe. Es
un bicho mental que vive en la cabeza y le damos un buen tratamiento hasta que
desaparezca. Es un trabajo duro, por cierto, pero vale la pena hacerlo, porque
aumenta tus horizontes, te da seguridad en ti mismo y sobrepasar estos límites,
a nivel psicológico, espiritual es un gran salto hacia delante. Veremos un
concepto de nuestra escuela. Tenemos un enfoque fuerte sobre las posturas
invertidas y trabajamos mucho Sirsasana (postura sobre la cabeza). A veces los
alumnos saben hacer la postura antes de venir al curso, pero aunque algunos
saben hacerla, la mayoría de los alumnos, normalmente no. Y para mucha gente
esta postura es como un reto a nivel
físico, a donde quieren llegar. La experiencia del curso es así: casi todos
aprenden sirsasana. Solo alumnos que por algún motivo no pueden practicarla
(una contraindicación que tienen), por lógica no lo aprenden y a veces ocurre
que un alumno intenta durante de todo el curso y al final no le sale. Pero es
un porcentaje mínimo de los alumnos. Normalmente quien quiere y practica –
aprende. Algunos enfoques de nuestra
escuela. Aunque el yoga siempre es el
yoga, dentro de esta rama tan grande existen varios tipos. En la práctica de
mayoría de estos tipos se incluye el trabajo con el cuerpo. En algunos casos
este trabajo es suave, en otros muy fuertes. Hatha Yoga es uno de muchos tipos
de yoga que existen actualmente. Lo que es el hatha yoga, se puede describir en
la siguiente manera: “Es un camino de desarrollo espiritual a través de un
trabajo fuerte con el cuerpo.” Es algo tradicional que en hatha yoga se trabaja
con el cuerpo fuertemente. Y, prácticamente, dos formas de trabajar con el
cuerpo mismo son asanas y pranayamas. Entonces nuestra escuela y el curso en
particular se inclinan hacia un trabajo fuerte con el cuerpo. Vemos la
importancia extra en las posturas invertidas y siempre enseñamos a los alumnos
Sirsasana (postura sobre la cabeza) y otros. Se puede decir que mayoría de la
gente que viene al curso no conoce esta postura. Pero al final del curso,
prácticamente todos los alumnos llegan a hacerla. Y la mayoría de los alumnos
que consiguen hacer sirsasana empiezan aprender el Escorpión. Otro punto que tiene la importancia extra para nosotros es pranayama. Aprendemos diferentes tipos
de pranayama y los practicamos. Dentro de este marco tan amplio nos enfocamos
mucho en la práctica de Kapalabhati. Algo típico de nuestro curso intensivo –
al final de curso, al practicar kapalabhati, varias veces hacer alrededor de 2
mil exhalaciones. Normalmente tarda hasta 40 minutos. Es una práctica
espiritualmente fuerte y provoca sus efectos en los alumnos. En realidad en
este blog ya hay un artículo un artículo de kapalabhati con el video. No voy a repetir lo
que está escrito allí. Se puede leer directamente. Otro enfoque del curso es el canto. Cada día empieza con una
meditación, cuando cantamos los mantras. Y cada día se termina con una meditación
que hace Sabine. En este tiempo se aprenden diferentes mantras y cantamos con
alegría. El canto de los mantras es un motor que mueve fuerte el alumno por la
carretera espiritual. Muchos alumnos justamente en esta práctica tienen sus
experiencias que después nunca olvidan.
Por último lo que quería contar
que es un curso súper divertido. Al final del curso todos los alumnos se hacen
amigos. Y a veces estas amistades son para siempre. Aunque el yoga es una
disciplina seria,
lo tomamos sin fanatismo y divertimos mucho. En las clases,
en el trabajo común. Las cenas son momentos de felicidad y alegría (desde luego
la comida rica es una de las fuentes grandes de esta felicidad). Y desde luego
este curso es el tiempo cuando practicamos yoga casi todo el tiempo. En las
clases, luego puede encontrar a los alumnos haciendo kakasana antes de la cena
y claramente, cuando estamos con karma yoga – hacemos asanas. Todos felices,
con una sonrisa de 32 dientes.
Al terminar este articulo, en
cierta forma quiero disculparme. Puede parecer que este texto tiene un “aspecto
promocional” del curso. No quería que salga así, quería simplemente contar de
nuestro curso intensivo de formación desde otro ángulo, el “ángulo humano”. Quería
escribir sobre diferentes aspectos del curso que no están presentes en nuestra
web. Pero el curso, es “una cosa” tan buena, que aparece este aspecto.
¡Queridos Compañeros de Yoga,
los entusiastas, alumnos, profesores y la gente interesada, también, querido
mundo entero! Os deseo ser felices, con la paz en el corazón, tranquilidad en
la mente, sonrisa en los labios y alegría en el estomago.
La experiencia de hacer el curso intensivo con Gleb la puedo definir como la experiencia más importante de mi vida por varias razones. Ese mes me brindó la oportunidad de conocerme realmente a mi misma (primer paso para saber que es eso de amarme a mi misma). Conocerme físicamente, de observarme, en cada asana, ser consciente de que los miedos, las limitaciones, sólo existen en nuestro pensamiento. Conocer el yoga como filosofía de vida, ver como todo el caos que aparentemente vemos en el mundo, no es tal caos, sino que todo encaja, como un puzzle, todo tiene una razón de ser. Fui testigo de cómo un puñado de personas desconocidas abrimos nuestro corazón, y al abrirlo tomé conciencia, de verdad, de que yo soy igual a ellos y ellos iguales a mi, ellos soy yo y yo soy ellos. Todas estas cosas ya las sabía, las había leído a lo mejor, pero nunca las había experimentado, y allí lo hice, y siento una paz especial dentro de mí que no había sentido nunca. Todo mi amor, Gleb y Sabine, desde el corazón, gracias. (Lakshmi-Julia)
Siempre queria ser rica ahora despues del hacer el curso con Gleb y Sabine ya se que lo soy....muchas gracias Gleb y Sabine por cambiar mi vida....os quiero mucho.....
La experiencia de hacer el curso intensivo con Gleb la puedo definir como la experiencia más importante de mi vida por varias razones. Ese mes me brindó la oportunidad de conocerme realmente a mi misma (primer paso para saber que es eso de amarme a mi misma). Conocerme físicamente, de observarme, en cada asana, ser consciente de que los miedos, las limitaciones, sólo existen en nuestro pensamiento. Conocer el yoga como filosofía de vida, ver como todo el caos que aparentemente vemos en el mundo, no es tal caos, sino que todo encaja, como un puzzle, todo tiene una razón de ser. Fui testigo de cómo un puñado de personas desconocidas abrimos nuestro corazón, y al abrirlo tomé conciencia, de verdad, de que yo soy igual a ellos y ellos iguales a mi, ellos soy yo y yo soy ellos. Todas estas cosas ya las sabía, las había leído a lo mejor, pero nunca las había experimentado, y allí lo hice, y siento una paz especial dentro de mí que no había sentido nunca. Todo mi amor, Gleb y Sabine, desde el corazón, gracias. (Lakshmi-Julia)
ResponderEliminarGracias, Julia por tu comentario tan lindo. Mil besos. Gleb y Sabine
EliminarSiempre queria ser rica ahora despues del hacer el curso con Gleb y Sabine ya se que lo soy....muchas gracias Gleb y Sabine por cambiar mi vida....os quiero mucho.....
ResponderEliminarQue bien escuchar tu voz virtual. Saludos del Pantano. Gleb y Sabine
EliminarGracias por el artículo. Estoy pensando hacer la formación con vosotros y me ha servido mucho toda la información. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias por tu comentario
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